Existe una sola palabra para
describir esta película: soponcio. En sus dos acepciones. Es que cuando uno
espera verla –sobre todo tras leer la novela en la que está basada- imagina que
se va a encontrar con un largometraje que va a explotar la acción de la trama y
la carga emotiva y psicológica que el personaje principal lleva consigo durante
el desarrollo de la historia. Pero la realidad fílmica es otra. Solo nos queda
al frente una película en estado de negación continuo. Es decir, una película
que no quiere ser película, sino un libro.
Uno
de los problemas de adaptar libros al cine es que se pierda, en el transcurso
del proceso, la esencia de la historia primigenia. Lamentablemente, una de las
mejores maneras para lograr esto es pretender que en el limitado tiempo que
dura una película entre toda la trama desarrollada a lo largo de una novela. ¡Por
algo son dos géneros distintos! Salvo la adaptación de El señor de los anillos,
no he encontrado buenas adaptaciones de libros en el cine que no terminen
transformando -de algún modo- la trama
de una historia, para que el film cobre vida y fuerza propios.
En
El juego de Ender esto no sucede así, a pesar que sí existen ciertas
modificaciones en la historia original. No olvidemos que lo que sucede con los
dos hermanos de Ender en la novela es obviado completamente en la película. Hubiera
sido mejor que la historia se centre en Ender y en su proceso de crecimiento
personal y militar en las distintas escuelas de combate en las que tiene que
ser entrenado. De tal manera que se pueda aprovechar la acción que le da a la
trama los juegos de combate que Ender va a desarrollar junto con sus demás
compañeros. Con ello también se habría profundizado en la psicología del resto
de los niños, especialmente de aquellos que lo van a acompañar a su “aventura”
final. Dejando de lado toda referencia familiar de Ender, que en la trama de la
película resulta finalmente innecesaria.
De tal
manera que el resultado final es una película que va saltando etapas de una
forma un tanto abrupta, con personajes poco o mal desarrollados, e incluso,
casi invisibilizados. Es probable que si no se tiene en mente la historia
original del libro, la película sea un tanto sosa y con poco sentido.
Dicho
esto, ya no me molesta tanto que no la hayan estrenado en el Perú.
Especialmente porque el final del film es tan malo como el del libro.
Anexos:
Anexos:
- Aquí pueden encontrar la reseña que hice a la novela en cuestión.
- Aquí hay otra crítica sobre la película, de lejos mucho más positiva que la mía.
2 comentarios:
Vaya, me estoy leyendo el libro y pensaba que estaría mejor la película..
Un saludo!
Pues el libro no tiene pierde. ¡Me tienes que comentar que tal te parece al terminar de leerlo! Y de todas maneras recomiendo que veas la película para que saques tus propias conclusiones. Gracias por leerme.
Publicar un comentario